Empiezo a pensar que no soy el preferido en casa, sobre todo después de que el otro día justo cuando, en un pequeño rellano a dos metros de altura sobre el suelo, me disponía a bajar por la desvencijada escalera provisional que da al garaje, cargado con una caja de agua (18 botellas, vacías eso si) en las manos, mi padre me dijo:
- Ten cuidado no te vayas a caer... y le rayes el coche a tu hermano.
¿No se supone que el pequeño debe ser el mimado? ...It's going to be that not.
- Ten cuidado no te vayas a caer... y le rayes el coche a tu hermano.
¿No se supone que el pequeño debe ser el mimado? ...It's going to be that not.
3 comentarios:
Creo que uno nunca sabe para quien trabaja, y el amor o desamor, preferencia o mejor trato siempre es relativo.
Muchos saludos.
Elva*
Yo se que en el fondo me quieren.
Por lo menos no han intentando mudarse sin que yo lo sepa.... por segunda vez. ;)
Un abrazo.
A veces pasan esas cosas...pero mientras tengas regalito bajo el árbol de navidad no tienes nada serio por lo que preocuparte xD :P Un besote!
Publicar un comentario